(Reseña de toda la serie, incluidas las dos temporadas y los especiales)

Esta serie es un estallo total y todo lo que podría esperar de una comedia "erótica" japonesa (aunque no tiene escenas subidas de tono realmente, sino que tocan siempre temas relacionados con la sexualidad y el sexo). Algo que me gusta mucho es que más allá del humor buenísimo, nunca sentí que se estuviera juzgando a nadie por sus preferencias ni formas de vida; por el contrario, siempre se hace desde una mirada curiosa y abierta, sin que nunca caiga en un juicio moral, gracias también al narrador hilarante de la serie.

La trama es sencilla y no se complica; el desarrollo es súper dinámico y en general se maneja un formato episódico sin que deje de haber historias lineales para cada personaje. Al mismo tiempo, uno no se da cuenta, pero en realidad los personajes que se van conociendo en la primera temporada son un montón y todos tienen su momento de protagonismo por mínimo que sea, cosa que me encanta. Durante la segunda temporada no hay personajes nuevos, así que simplemente continuamos viendo el progreso en los vínculos entre los personajes.

A pesar del tono nada serio, tocan muchos temas, como ya dije, con una apertura de mente muy agradable, que considero están bien planteadas y representadas. Los personajes se hacen querer y me encariñé mucho con el grupo de los cinco protas. Una serie súper fácil de ver y maratonear que promete sacarte muchas carcajadas. Me encantó y obviamente la recomiendo.